Bye Bye 2011....

Hoy es el último día de este año 2011. Un año que, a nivel de moda, ha venido cargadito de nuevas tendencias: desde el encaje en color rojo, pasando por la vuelta del pitón a todo color, hasta retomar los fedoras para salir a la calle.

                                                                     

Tendencias que vimos, entre otros, en el desfile de Gucci en Milán.

Galliano abandonó la casa Dior, Gaultier dejó Hermès, Jonathan Saunders se ha encargado de la nueva colección para esta primavera de la firma Escada, la colección de Versace para H&M fue un éxito rotundo (si bien ya conocéis mi opinión).

Podría seguir hablando de moda todo lo que queda de tarde, y la noche, el día siguiente, etc. Porque este mundo tan chic no para de avanzar, recuperarando tendencias del pasado, como es estilo MOD visto en Cèline. O bien aparecen nuevos creadores con muchísimo talento que aportan frescura al planeta fashion, como Mary Katrantzou y sus vestidos cortados al láser.                                                 

                                                         

Desfile primavera verano de Mary Katrantzou

La colección que, hasta ahora, por su puesta en escena y magníficos vestidos, me ha encantado, es la ideada por el káiser de la moda Karl Lagerfeld para Chanel inspirada en los encantos de la India: "Paris-Bombay". Un lujo para la vista y los sentidos, la colección Pre-fall nos invita a descubrir el exotismo de oriente, y nos abre el apetito a viajar a ese país tan desconocido para nosotros los occidentales, con una cultura muy rica que seguro que nos llenará si nos decidimos a hacer ese viaje. Algo pendiente en mi lista de própositos. Lo más de esta colección, que estará en tiendas en verano, es que Lagerfeld confesó, tras finalizar el desfile, no haber pisado nunca tal país, pero que eso le inspira todavía más a crear ricos bordados, joyas para el pelo, aplicaciones de pedrería. Todo sin olvidar del uso de su material fetiche, el tweed, y el estilo Ladylike característico de la firma.

 

                                                         

Pero creo que a esta magnífica colección le dedicaré con calma, otro día, todo su propio artículo. Ya que me ha realmente enamorado, y no quiero adelantar nada más.

Este año 2011 realicé el que, hasta ahora, ha sido uno de los mejores viajes de mi vida: Nueva York junto a mi madre. Tanto por la compañía, la ciudad, los buenos momentos compartidos junto a mi madre, como lo que me he enriquecido respecto a la moda. Todo lo que buscas, en esa ciudad lo encontrarás. Y es que, pese a que suene a tópico, es totalmente cierto. Y quiero perseguir mi sueño que tengo desde pequeña: volver para quedarme, aunque sea por unos años.

Por mi cumpleaños, me autorregalé un gran bolso de una estupenda maison francesa: mi tan apreciado clutch de Balenciaga. Una gran inversión que no ha desmerecido la pena.

He ampliado mi fondo de armario, tanto con alguna cosilla de Zara, H&M o Asos, como invirtiendo en grandes piezas atemporales: mi falda de Jil Sander de este verano en verde neón o la de invierno en verde oscuro; mis sandalias blancas de piel de Jimmy Choo; mi camisa de Paul & Joe estampada en tonos azules; una camisa que me regalaron de la firma francesa The Kooples (que está creciendo con fue
rza en el m undo fashion) o mi bolso fuchsia Coach, entre otras adquisiciones.

Me gusta la moda, y todo lo que gira a su alrededor, como las miniaturas de perfume, las lacas de uña de edición limitada de Chanel o Dior, los libros sobre complementos, diseñadores o fragancias míticas como Chanel nº5 o algunas puestas en escena de grandes desfiles. Especialmente la alta costura.

Todo este mundo me apasiona, pero la vida es más que eso: la vida es bella y hermosa, si sabes vivirla bien. Y todos hemos de aprender de los errores cometidos a lo largo de este año, para ser mejores el año que entra. Y vivir felices, sonriendo a cada minuto, y alegrándonos de todos los pequeños detalles que nos trae el día a día. Y, por desgracia, hablo desde la experiencia de una pequeña desgracia que me sucedió pero me está ayudando a fortalecerme, crecer interiormente como persona y a ver la vida desde otra manera.

Sólo me queda deciros que os deseo lo mejor para este año 2012 que viene, que siguaís compartiendo mis mini aventuras fashion, que disfrutéis leyendo mi blog pero, especialmente y sobretodo, que, pese a la crisis económica que nos rodea, no os hundáis, y viváis todo lo mejor posible y felices que podáis. Un año más, pero que sea feliz para todos vosotros. Y recordad una cosa: la vida es como un jardín. En primavera y verano todo florece, las flores huelen, las mariposas revolotean a nuestro alrededor, el sol siempre brilla. Pero en otoño e invierno las hojas se caen de los árboles y se secan, se mueren las raíces, las flores se apagan y marchitan, va cayendo la luz solar que ilumina nuestros días. Y la vida es esto mismo. Pero, como cuidaríamos un jardín para que, en primavera, vuelva a florecer y resplandecer por sí mismo, hemos de cuidar nuestra vida y lo que nos rodea, como la economía. Si nos esforzamos, si no cejamos en nuestro empeño de querer que vuelva a salir el sol, todo volverá a la normalidad. Remontará la economía, el país mejorará, como florecen las flores y vuelven a salirle hojas a los árboles. Ese es el ciclo de la vida. Momentos malos pero el sol brillará con mucha más fuerza cuando vuelva a aparecer. Creer en ello y lograréis vuestros propósitos para este año venidero.

Muchísimos deseos para este año 2012, que venga cargado de esperanza, alegría y felicidad. Besos y nos encontramos el año que viene!!!!! Que ahora toca ponerse guapas y preparar la gran cena de Noche Vieja.